Los principales grupos distribuidores y los diferentes subsectores que forman el mercado de consumo (Distribución, Alimentación y Bebidas, Productos de gran consumo y Restauración organizada) han acometido sendas operaciones de compraventa de establecimientos comerciales (tiendas, supermercados, hipermercados…) en relación su estrategia de crecimiento o desinversión de negocio.
En 2018, según los datos de Nielsen, en materia de gran consumo, el 1,2% de las ventas del mercado español son “virtuales”. Corea del Sur lidera con el 18%. En 2022, el mercado global de ecommerce de gran consumo crecerá el doble hasta llegar a los 400.000 millones de euros por lo que la transformación digital tiene una importancia capital ya que las empresas de este sector para ganar en competitividad, tendrán que adaptarse a la economía digital y transformarse para seguir creciendo en un entorno cambiante y altamente competitivo.
Igualmente, cabe destacar el incremento del consumo de las familias, estancado durante el periodo de crisis, que ha supuesto un incremento de las ventas del sector. Por otro lado, la franquicia ha ganado protagonismo entre importantes operadores, gracias a la implantación de productos locales y regionales, adaptados a los gustos y necesidades de cada consumidor, así como la apuesta creciente en la venta de productos frescos y bios.
Además, dentro del plan de crecimiento de las empresas distribuidoras, la expansión a internacional ha jugado un papel importante.