THE BODY SHOP: ANITA RODDICK (1942-2007)

THE BODY SHOP: ANITA RODDICK (1942-2007)


CONOCE LA VIDA Y TRAYECTORIA DE LA FUNDADORA DE LA EMPRESA DE COSMÉTICOS THE BODY SHOP.

 

En esta entrada conoceremos la vida y trayectoria de Anita Roddick, quien fundó la empresa de cosméticos sostenible The Body Shop en el año 1976. Anita fue considerada por el público como una mujer  que innovadora por abrir una empresa cosmética basada ingredientes naturales (aunque la idea original fue de dos mujeres californianas).

Sin embargo, lo más destacable de Anita es cómo impuso sus valores activistas, éticos y de diversidad han marcado la diferencia, haciéndola una adelantada a su tiempo, y quizás una de las pioneras de los grandes cambios que actualmente se viven en la industria de la belleza en general. Así que comencemos:

 

ANITA RODDICK: SUS PRIMEROS AÑOS

 

 

Anita Roddick, fundadora de la compañia

 

Anita Lucia Roddick, cuyo nombre de soltera era Anita Lucia Perella, nació el 23 de diciembre de 1942, en Littlehampton, West Sussex, Reino Unido. Fue la tercera de los cuatro hijos de un matrimonio formado por inmigrantes italianos.

Anita durante su adolescencia quiso estudiar interpretación. Pero, finalmente,  por influencia de  su madre, quien era maestra, decidió estudiar educación.

 

ANITA RODDICK ANTES DE THE BODY SHOP

 

 

Anita y su esposo Gordon Roddick

Después de recibirse como maestra, Anita  comenzó a dar clases de historia y de literatura inglesa en el colegio donde cursó sus estudios secundarios. Prontamente, dando renda suelta a su espíritu inquieto, Anita se trasladó a Paris, donde trabajó  en la biblioteca del International  Herald Tribune, después se trasladó a la ciudad de Ginebra en Suiza, donde trabajó para las Naciones Unidas.

Durante ese periodo, Anita entró en contacto con la cultura hippie que despertó su interés. Por ello,  recorrió Europa, África y el Pacifico Sur, lugares donde entró en contacto con sus comunidades autónomas.

En uno de sus viajes, Anita fue a California, Estados Unidos, donde  se encontró con una tienda llamada The Body Shop, la cual vendía productos cosméticos hechos con ingredientes totalmente naturales, y también tenía un particular sistema de reciclado de los recipientes debido a que los clientes podían regresar a la tienda con el mismo recipiente que habían adquirido para llenarlos con el producto.  Esta tienda fue la inspiración directa para que Anita creara su The Body Shop, por cuanto estaba a tono con sus valores éticos.

A su regreso al Reino Unido, Anita conoció a Gordon Roddick,  un hombre bohemio, amante de la poesía y de los viajes. Entre ambos obviamente surgió la química, por lo que se casaron en el año 1970. Rápidamente llegaron sus dos hijas Justine y Samantha.

 

Anita con sus hijas Justine y Samantha

El matrimonio Roddick abrió un hotel y posteriormente un restaurante. Pero en el año 1976, Gordon Roddick decidió cumplir uno de sus sueños de vida, recorrer el continente americano partiendo desde Argentina hasta llegar a los Estados Unidos, sin embargo, lo particular es que lo haría a caballo.

Para ello, Anita tuvo que vender el restaurante que tenían. Sin embargo,  ella lo hizo a gusto, por lo que llegó a declarar:

 

“Me sentía afortunada por tener una pareja que dijo ‘Debo hacer esto. Tengo que ser recordado”.

 

 

ANITA RODDICK Y THE BODY SHOP

 

 

Mientras su esposo estaba realizando su aventura americana, Anita Roddick decidió abrir una tienda de cosméticos con la finalidad de que le ayudara a asumir sus gastos familiares. Como ya se explicó anteriormente, Anita se inspiró en el concepto de la tienda californiana The Body Shop. Sin embargo, le añadió otros valores más activistas.

Su filosofía empresarial era la siguiente: “Un negocio puede cambiar al mundo. Es capaz de cambiar la sociedad de todas las maneras imaginables”.

En este sentido, The Body Shop desde sus inicios ha tenido como valores la sostenibilidad de sus productos y  la promoción de la belleza diversa e inclusiva.

 

Sobre la belleza, Anita Roddick llegó a decir lo siguiente: “La belleza es una expresión exterior de todo lo que te gusta de ti misma”.

 

 

Anita Roddick, fundadora de The Body Shop

 

Por lo que durante sus primeros años la compañía no hacía publicidades de ningún tipo, dependiendo solamente del boca a boca de sus clientes, considerando que sus productos, más que dar una apariencia determinada, daban una sensación  de cuidado y bienestar y eran para cuidarse uno mismo y hacerse sentir bien.

Sin dudas, Anita Roddick es una pionera en la promoción  de la  diversidad de la belleza, por cuanto 40 años después marcas como Dove, que es propiedad del gigante Unilever  están replicando estos valores  de belleza  de los cuales Anita fue pionera, y vemos que más marcas usan a modelos más diversas en su estilo para promocionar sus productos, dejando de lado el prototipo de belleza caucásica europea.

 

ANITA RODDICK Y SU ACTIVISMO MEDIOAMBIENTAL.

 

 

A partir de la década de los 80, Anita Roddick, entonces CEO de The Body Shop, tomó un estilo más activista en su forma de dirigir la compañía. Es preciso indicar que esa década es una de las más exitosas para la empresa por cuanto comenzó su expansión internacional, la cual se inició por medio de franquicias y después lo hizo de forma directa. También, las acciones de la empresa comenzaron a cotizar en la bolsa de valores de Londres.

 

 

En este sentido,  Anita consideraba que “Las dimensiones sociales y ambientales  están cosidas en la tela que es la compañía. No son ni los primeros ni los últimos de nuestros objetivos, sino que son parte indispensable de todo lo que hacemos”.

 

 

 

Por todo esto, en el año 1986, Anita Roddick se unió a la organización ambientalista Greenpeace en la defensa de las ballenas. La campaña se llamó “Save The Whale”,  cuya finalidad era  promover el uso del aceite de jojoba como sustituto del aceite de esperma de ballena, que era un ingrediente muy usado en la industria cosmética en esos años. Y de esa forma, The Body Shop se convirtió en una de las primeras empresas en colaborar con  Greenpeace.

 

 

Otras campañas en las que Anita Roddick,  participó, durante su etapa como CEO de la empresa,  fueron  “Stop The Burning”, la cual tenía como propósito la lucha contra los incendios en la selva amazónica;  “Plight Of The Ogini People”, un pueblo que se vio obligado a desplazarse de sus tierras debido a la explotación petrolera en Nigeria, y “Choose Positive Energy”, una campaña para la cual Anita volvió a unirse a Greenpeace para promover el uso de energía renovable.

Por otra parte, de la mano de estos valores, The Body Shop lanzó el programa que actualmente se llama Community Fair Trade, en 1997, con la finalidad de obtener sus materias primas directamente de las comunidades que las producen, pagándoles precios justos. Las mujeres agricultoras han sido de las más favorecidas por el programa, ya que les garantizan recibir pagos justos y así evitar ser explotadas. De esta forma, la compañía ha puesto en práctica la siguiente frase de Anita Roddick:

 

“Creo que las prácticas empresariales mejorarían inmensamente si estuvieran guiados por los principios femeninos”.

 

 

Anita Roddick y la princesa Diana

Gracias a todo el reconocimiento que alcanzó por su activismo en diversas áreas, Anita Roddick fue reconocida por la reina de Inglaterra como Dama de la Orden del Imperio Británico en el año 2003.

 

ANITA RODDICK Y SU ALEJAMIENTO DE THE BODY SHOP

 

 

 

A pesar de que en la década de los años 90  The Body Shop se expandió  a los mercados europeos, asiáticos y latinoamericanos, la compañía comenzó a tener problemas en los Estados Unidos y Reino Unido. La entrada de nuevas marcas naturales comenzaron a hacerle seria competencia a la compañía, sobre todo Bath & Body Works de L Brands. Además, tanto Anita como su esposo comenzaron a dedicarle más tiempo a sus causas activistas.

En este sentido, Anita fundó, en 1990, Children on the Edge, una organización que se encarga de ayudar y darle protección a niños en situación de calle o que están expuestos a serlo. La organización ha ayudado a niños que han sufrido crisis como la causada por la guerra en Kosovo y el terremoto de Haití.

 

También se involucró en el caso de The Angola Three, tres hombres afroamericanos,  que cada uno estuvo aislado en una celda sin contacto alguno por cuarenta años en una cárcel de los Estados Unidos.

Pero debido a la caída de los márgenes de ganancia, Anita y Gordon Roddick se retiraron del día a día de la empresa en 1998, cuando aún era una empresa que cotizaba en la bolsa.  Sin embargo, en el año 2002, los Roddick dieron el paso definitivo y dejaron el control de la empresa a Peter Saunders, los Roddick quedaron con papeles de asesores de la compañía solamente.

En 2006, los Roddick causaron polémica cuando vendieron The Body Shop al conglomerado L’Oreal por un monto de 1,14 mil millones de dólares, de los cuales los Roddick se llevaron más de 100 millones de dólares.

 

ANITA RODDICK: SUS ULTIMOS AÑOS

 

 

Para Anita Roddick la empresa nunca fue un medio para hacerse millonaria, sino un medio para lograr sus metas altruistas y promover un mundo más compasivo y diverso.

En este sentido, destinó sus últimos años a la lucha y la consciencia sobre la enfermedad hepatitis C, enfermedad que le causó cirrosis hepática, la cual le fue diagnosticada en el año 2004. Anita contrajo la hepatitis cuando debió recibir transfusión de sangre ya que el parto de su hija menor fue difícil.

En consecuencia, Anita pasó sus últimos años ayudando el trabajo de la fundación The Hepatitis C Trust.  El día 9 de septiembre de 2007, fue hospitalizada debido a unos fuertes dolores de cabeza que estaba sufriendo. Al día siguiente, el  10 de septiembre de 2007, Anita Roddick debido a una hemorragia cerebral causada por la cirrosis.

 

 

LEGADO DE ANITA RODDICK

 

 

A pesar de todo el dinero que logró  ganar durante su trayectoria en The Body Shop, consideraba que dejarle la fortuna a su familia sería algo obsceno. En consecuencia, Anita Roddick, antes de su muerte, donó casi la totalidad de su fortuna a organizaciones caritativas.

Su legado sigue vivo a través de la Fundación Anita Roddick, la cual creó en 1997 y sigue activa gracias a su familia. Esta fundación ha donado anualmente más de un millón de dólares a causas tan variadas como las artes, el medio ambiente, los derechos humanos, la salud y los derechos sociales.

Sin dudas Anita Roddick es una pionera de esta época. Sus luchas y causas sirven de ejemplo de que se puede tener una gran empresa con ética y sin hacerle daño al ambiente. Pero por lo que es más recordada es por sus ganas de cambiar el mundo  por medio de su empresa. De ahí su famosa frase “Si crees que eres muy pequeño para tener un impacto, intenta ir a la cama con un mosquito”.

Además, Anita dejó escritos varios libros donde podemos aprender de su trayectoria, entre ellos The Body Shop Book (1985), Take it Personally: How Globalisation Affects You and Powerful Ways to Challenge It (2004) y Business as Usual(2005).

 

 

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