CONOCE LA BIOGRAFÍA Y LA TRAYECTORIA PROFESIONAL DE SILVIA VENTURINI.
En esta entrada comenzaremos una serie de dos partes donde haremos un recorrido en la trayectoria y carrera de Silvia Venturini Fendi, directora creativa de accesorios y vestuario para hombre de la casa de modas italiana Fendi.
Silvia desde su más tierna infancia ha estado en contacto con la moda, ya que es nieta de los fundadores de la empresa de modas italiana y su madre y tías manejaron por muchos años la casa Fendi, logrando convertirla en una de las más relevantes de la moda italiana, y desde su más tierna infancia ha conocido al legendario Karl Lagerfeld.
Así que conozcamos a la diseñadora Silvia Venturini Fendi:
SILVIA VENTURINI FENDI: SUS PRIMEROS AÑOS
Karl Lagerfeld con las hermanas Fendi
Silvia Venturini Fendi nació en el año 1960, en Roma, Italia. Es una de las tres hijas de Anna Fendi y Giulio Venturini (sus hermanas se llaman Ilaria y Maria Teresa), y nieta de los fundadores de la casa Edoardo Fendi y Adele Cassagrande, por supuesto, sobrina de Paola, Franca, Carla y Alda, quienes junto a la madre de Silvia se hicieron famosas en la industria de la moda como “Las Cinco Hermanas Fendi”.
Silvia creció rodeada de moda, ya que muchos de los días de su infancia transcurrieron en el atelier Fendi donde veía a su madre y tías trabajando, cada una de ella ocupando puestos que en esa época eran ocupados por los hombres. De las mujeres de su familia, Silvia Venturini ha dicho lo siguiente: “Mi madre y mis tías trabajaban todo el día y frecuentemente hasta horas de la noche. Ellas estaban locas por el trabajo, era su pasión: pero no por el dinero, sino por el placer y el amor al arte”.
Al crecer en un hogar donde las mujeres eran fuertes y podría decirse que avanzadas a su tiempo debido a los puestos de poder que ocupaban, hicieron que Silvia, desde su más tierna infancia, se diera cuenta del poder que cuentan las mujeres, y que se puede ser una madre amorosa y presente aunque se cuente con una carrera profesional exitosa.
En este sentido, Silvia ha dicho: “Yo creo que mi madre jamás preparó una sopa en su vida, pero ella siempre hacía tiempo y me metía al avión rumbo a Milán para ir al mejor peluquero para arreglarme el cabello…Recibí amor, estoy segura, pero de una manera diferente que las otras familias”.
Al atelier de Fendi, donde la pequeña Silvia pasaba gran parte de sus días, acudían personas de la talla de Silvana Mangano, Luchino Visconti, Federico Fellini, entre otros, quienes acudían a la sede de la casa italiana para, además de adquirir sus prestigiosos productos, discutir colaboraciones artísticas. Silvia Venturini recuerda: “Pequeña, no comprendía mucho lo que pasaba, pero sentí fuertemente a la electricidad y la exaltación que reinaba en el ambiente”.
Sin embargo, de todas las personalidades que pasaron por el atelier Fendi en Roma, una sin lugar a dudas marcó su vida y su carrera: el creador alemán Karl Lagerfeld, quien fue contratado por su madre y tías para que se encargara del diseño de las colecciones femeninas de la casa Fendi.
La llegada de Lagerfeld a la casa Fendi se produjo en 1965 cuando Silvia tenía apenas cinco años. Lagerfeld se refería a la pequeña como “enfant des yeux tristes” (la niña de los ojos tristes). El movimiento de las hermanas Fendi en contratar a Karl Lagerfeld fue en su momento bastante innovador pero finalmente dio sus frutos, ya que el creador alemán logró posicionar la marca Fendi a nuevos niveles.
Silvia Venturini Fendi, en una entrevista a la edición española de la revista Vanity Fair dijo: “Mi madre y mis tías tuvieron muy buen ojo al escoger a Karl al principio de su carrera. Junto a él hicieron cosas increíbles. Fendi se convirtió unos pocos años después en el líder en peletería”.
Tal fue el impacto que Lagerfeld tuvo tanto en Silvia como en la familia Fendi en general, que es conocido como “el único hombre Fendi”. Ahora bien, en relación al papel de los hombres de su familia, Silvia reconoce que son hombres listos que no tenían problema alguno con el éxito logrado por las mujeres Fendi. Además, reconoce que su padre, Giulio, era quien las recogia del colegio a ella y sus hermanas y quien les preparaba el almuerzo.
LA JUVENTUD DE SILVIA VENTURINI FENDI
Con toda esta influencia de la moda, no es de extrañar que Silvia Venturini haya desarrollado propiamente su propio sentido de la moda. Hay una anécdota que ha contado la propia Silvia que durante unas vacaciones de verano, mientras paseaba con sus hermanas y su niñera, varias personas abordaron a su niñera preguntando si las niñas estaban de duelo debido a que las niñas estaban vestidas de negro, algo que no era común en esa época.
Esta anécdota sirve de indicio del estilo que Silvia adoptaría en el futuro, uno con toques masculinos, que en el futuro la valdría el puesto de directora creativa de la línea masculina de Fendi.
Silvia Venturini Fendi cursó estudios en Italia, Londres. Ahora bien, en la década de los 80, Silvia Venturini Fendi vivió un periodo de rebeldía ya que se fue a los Estados Unidos a vivir una vida de fiesta, yendo a los locales de moda de la época como Studio 54. En esa misma época, “se casó” (un matrimonio ficticio sin ningún tipo de validez legal) con el padre de sus hijos Giulio, Delfina y Leonetta. Durante su “boda”, Silvia usó un vestido rojo, muy fiel a su estilo más irreverente.
Silvia Venturini Fendi y su madre Anna Fendi
De hecho, se pensaba que quien ocuparía el puesto de creativa de la casa sería su hermana Maria Teresa, ya que realizó prácticas en Fendi y acompañaba a su madre y tías a los eventos. Sin embargo, el periodo de rebeldía de Silvia Venturini no duró mucho y comenzó a integrarse al negocio familiar, pero eso sí, desde abajo. Entre sus primeras labores para la casa se encontraban la organización de eventos para la casa. En la ciudad de Los Ángeles trabajó en la parte de marketing para la empresa y a finales de la década, en 1987, creó Fendissime, una línea más juvenil dentro de la marca.
LA INCORPORACIÓN DE SILVIA VENTURINI COMO DISEÑADORA DE FENDI
Con toda la experiencia que Silvia Venturini Fendi fue acumulando durante toda la década de los 80, finalmente, en los años 90 ya estaba preparada para entrar formalmente a la casa Fendi en un puesto de responsabilidad. En 1994, se convirtió en la directora creativa de accesorios de la casa, por lo que estaría compartiendo las responsabilidades de diseño con Karl Lagerfeld.
El estilo de trabajo de Silvia Venturini Fendi y Karl Lagerfeld como los responsables creativos de la casa era de colaboración, pero cada uno con autonomía. En este sentido, describió la relación de trabajo entre ambos de la siguiente manera: “Trabajamos de forma muy libre y creativa. Él estaba en París y yo en Roma, así que él solía proponer sus ideas en la distancia y luego revisaba lo que el equipo hacía con ellas”.
En 1997, Silvia Venturini Fendi comenzó a dejar su huella en la moda, ya que en dicho año creó el bolso Baguette, el cual se convirtió en todo un icono de la moda y es considerado una referencia en materia de bolsos, a los mismos niveles que los bolsos Birkin y Kelly de la casa Hermes, y que hizo de la casa Fendi toda una referencia en materia de accesorios.
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