LAS PERLAS SINTÉTICAS O ARTIFICIALES.

Nuestra Redacción

hace 2 años

¿QQUÉ ES UNA PERLA SINTÉTICA O ARTIFICIAL? APRENDE A DIFERENCIARLAS DE LAS PERLAS NATURALES.

Para crear una perla artificial se sigue un proceso similar al de la ostra. Éste proceso de creación comienza con el núcleo interior. Este se cubre capa por capa con “esencia de perla” que se obtiene a partir de productos orgánicos y pigmentos nacarados como el oxicloruro de bismuto que da a la perla su característico brillo e iridiscencia.

Al controlar el desarrollo de la perla y su proceso se puede conseguir una perla perfecta, algo que no se consigue con la perla de la ostra, ya que su desarrollo no es controlado, por lo que suele ser siempre irregular.

Las perlas sintéticas o artificiales son las fabricadas directamente por el hombre, sin que intervengan en el proceso ningún molusco. Están realizadas en la mayoría de los casos de resinas, aunque podemos encontrar perlas realizadas con otros materiales como cerámica, plástico e incluso vidrio.

Las perlas artificiales suelen tener una tonalidad más amarillenta que las naturales, además con el tiempo, dependiendo de su calidad, se vuelven aún más amarillas. Estas perlas, si no las cuidáis adecuadamente, con el tiempo o con los arañazos del día a día suelen pelarse, ya que al no ser naturales la primera capa tiende a perderse.

Las perlas artificiales lacadas presentan un lustre profundo similar al que ofrecen las perlas naturales de alta calidad. Su uniformidad en cuanto a tamaño, forma y color, la convierten en ideal para todo tipo de piezas de joyería. Las perlas artificiales están disponibles en una amplia variedad de colores.

Las perlas artificiales lacadas consisten en un centro de cristal artificial recubierto con un revestimiento innovador similar al de una perla. El revestimiento de la perla se compone de una capa base y una laca de nitrocelulosa. El grosor del lacado final es de aproximadamente 0,1 mm

Con una dureza de 6,5 – 7 en la escala de Mohs y una óptima resistencia, la perla artificial lacada es duradera e ideal para su uso en todo tipo de joyas

¿Cómo saber si mis perlas son reales?.

Según datos aportados por la red, hay diversas formas de distinguir cuando una perla es real o falsa. Esta verificación puede resultar a veces muy fácil, pero dependiendo de la calidad de las perlas artificiales, es posible que se necesiten realizar pruebas más complejas que tenemos que solicitar a un experto.

Antes de señalar los pasos a seguir para distinguir cuando una perla es genuina, vamos a recordar un poco que son y como se forman las perlas.

Las perlas naturales se forman cuando un cuerpo extraño se introduce en el interior del cuerpo de un molusco, y al no ser capaz de expulsarlo, éste reacciona superponiendo lentamente en capas concéntricas sobre la partícula una mezcla de cristales conocida como nácar; Al cabo de un tiempo, la partícula termina totalmente envuelta por estas capas de nácar, cuanto más tiempo permanezca este elemento en el interior de la ostra, más capas de nácar se segregarán sobre él.

Este acto puede ser natural, o producido por el hombre. Si se trata de un acto natural este proceso tarda como mínimo 10 años, en el caso del cultivo, tras implantar un trozo de tejido dentro del molusco, éste se devuelve al agua y solo queda esperar entre seis meses y varios años a que la perla se forme.

Pero si hablamos de perlas artificiales, estamos hablando de perlas creadas por el hombre al 100%, y claro, dentro de estas perlas artificiales, también hay muchas calidades, y las más famosas del mundo por su calidad y belleza, son las perlas de Mallorca.

Para fabricar estas perlas de tan alta calidad, un núcleo de cristal blanco se sumerge decenas de veces en una esencia de perla madre, que lo va recubriendo en capas extremadamente finas una sobre otra, y que forman la superficie nacarada.

La superficie de estas perlas muy dura y muy lisa, y no se ve afectada ni por el maquillaje, ni por el perfume o los cambios de temperatura. De menor calidad tenemos otras perlas que se utilizan como abalorios en bisutería, que son imitaciones hechas con resinas, plásticos u otro tipo de materiales. Y una vez que tenemos claro cuáles son las reales y cuales las artificiales, vamos a ver que maneras tenemos de distinguirlas, ten en cuenta que cuanta más calidad tenga la perla artificial, más difícil va a ser distinguirla de una real, y a veces habría que hacer pruebas más complejas para estar seguros.

Una manera muy sencilla de saber si una perla es real o artificial es la temperatura. Las perlas naturales están frías cuando las tocas con la piel después de un tiempo sin haberlas utilizado, aunque poco a poco van aumentando su temperatura al contacto con la piel.

Las perlas falsas, en cambio, están a temperatura ambiente, y se calientan mucho más rápido, sin embargo, ojo! las perlas de alta calidad también pueden tener una temperatura fría cuando su núcleo es de cristal.

El roce: Si friccionas una perla contra otra, y notas una ligera resistencia, esto suele ser característico de las perlas reales, las superficiales son completamente lisas y esta fricción no se nota.

Comprobar la textura es quizás es uno de los métodos más fáciles para saber si una perla es real o artificial

las perlas naturales se distinguen de las falsas por su textura superficial, si frotas los dientes contra estas, notarás que las perlas verdaderas son ásperas y arenosas, tienen un patrón escamoso, en cambio las falsas son mucho más suaves. Y si son de baja calidad, la capa superficial de nácar se levantará cual esmalte de uñas.

Fíjate en la forma y la superficie, una perla natural es difícil que sea perfectamente simétrica y redonda, es verdad que hay perlas reales que pueden ser perfectas, pero ya estaríamos hablando de gemas de valor muy alto, por eso, si es una esfera perfecta, desconfía.

Y en el lustre de su superficie, las perlas naturales también suelen tener pequeñas imperfecciones y diferencias, en cambio las artificiales presentan un brillo, además de alto, totalmente homogéneo.

Si las perlas están perforadas, fíjate en el borde del agujero de perforación, si éste es definido y limpio, esto es característico de las perlas naturales, también suelen tener un anillo alrededor del agujero de perforación, y si ves astillas de plástico o vidrio alrededor del agujero, esto es un indicativo de que las perlas son falsas.

El peso: Generalmente, las perlas artificiales son más livianas que las naturales, que se hacen más pesadas, aunque esto es difícil de apreciar cuando las perlas son muy pequeñas, además, como decíamos antes, hay perlas artificiales de una calidad tan buena que esto apenas se aprecia, porque sus núcleos igualan el peso de las perlas naturales.

Siempre que las pruebas las hagas tú, para estar más seguro/a, te aconsejamos hacer varias, nunca limitarte a una.

Cuando las perlas falsas non son de gran calidad, estas pruebas suelen ser efectivas, ya que las diferencias suelen ser muy evidentes, sin embargo, como te decíamos antes, cuando las perlas artificiales son de una calidad alta, pueden llevarnos a confusiones. Así que, si haces las pruebas tú misma y aun así te quedan dudas, lo mejor para saber si una perla es real o artificial, es que consultes con un experto gemólogo, que con su experiencia y las pruebas que te vamos a comentar a continuación, te sacará de dudas con toda fiabilidad:

-Prueba del refractómetro: Si quieres saber con seguridad si una perla es auténtica o no, esta prueba mide el material de que está hecha según su índice de refracción.
-Prueba de rayos X: Con esta prueba, saldrás de dudas con total seguridad.

Un consejo más, no desconfíes si las perlas tienen colores demasiado llamativos o irreales, actualmente las perlas cultivadas se tiñen con pigmentos de todos los colores imaginables, y un color demasiado exagerado o irreal no significa que la perla sea artificial, aunque sí lo sea el color.

¿Cuál es la diferencia entre una perla silvestre y una artificial?

Como ya lo hemos esbozado, las perlas naturales o silvestres como las cultivadas son producidas por ostras y por lo tanto son consideradas joyas valiosas, un verdadero regalo de la naturaleza.

La única diferencia entre ellas es que las perlas naturales empiezan a producirse por un accidente natural mientras que las perlas cultivadas son iniciadas por la mano del hombre. Aquí hay una semejanza entre perlas cultivadas y las artificiales que también a través de un proceso interno son elaboradas por el hombre con la diferencia que la perla artificial no es generada por un molusco sino por materiales como resina, cerámica, plástico, vidrios entre otros.

Un joyero experimentado generalmente puede observar por el agujero que atraviesa una perla y determinar su origen (la capa de nácar de la perla cultivada es más delgada) , pero si la perla no está perforada es más difícil, ya que el material superficial de la perla natural y cultivada es el mismo. Pueden emplearse varios ensayos sencillos, como el peso específico, examen al trasluz, obsevación bajo lente de aumento, pero no siempre son conclusivos.

La única manera segura de diferenciar entre una perla natural y una cultivada es utilizando una combinación de radiografía con rayos X y fluorescencia de rayos X.

La mayoría de los expertos en perlas pueden apreciar la diferencia entre una perla de imitación y una real solamente con verla. Sin embargo, gracias a sofisticadas técnicas de fabricación y terminación, puede ser difícil para el consumidor medio distinguir a simple vista entre una perla natural o cultivada y una buena imitación. Una manera fácil de averiguarlo es realizando la «prueba del diente».

Si se roza lentamente una sarta de perlas de imitación con los dientes, el tacto será suave. Una sarta de perlas naturales o cultivadas se sentirá un poco arenosa.Esta sensación «arenosa» proviene de la estructura cristalina del nácar que forma las perlas reales y cultivadas. Las perlas artificiales son las que se utilizan en bisutería y están al alcance de cualquier bolsillo, ya que su precio es bastante más asequible.