CONOCE LOS ZAPATOS DE SALVATORE FERRAGAMO. PARTE 2.
“Descubrí que el peso de nuestros cuerpos, cuando estamos de pie , cae directamente sobre el arco del pie. Construí mis hormas revolucionarias, las cuales al sostener el arco, hacen al pie actuar como un péndulo invertido» Salvatore Ferragamo
La marca Salvatore Ferragamo puede presumir de ser una de las más experimentadas en el mady in Italia con casi cien años de sostenibilidad en la industria del calzado. En términos de actitud hacia la innovación, la industria italiana del calzado no fue una excepción.
La fama de Ferragamo como diseñador de calzado aumentó constantemente en la década de 1920 y su base de clientes se extendió más allá del mundo de la actuación y más allá de su capacidad para intuir los efectos del momento histórico que le tocó vivir. El intento de expandir su tienda a un negocio de fabricación de calzado más grande fracasó, dada la falta de personal calificado en los Estados Unidos, lo que lo obligó a regresar a Italia.
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La inventiva Ferragamo frente a la crisis de materiales
En 1927, Ferragamo estableció una nueva empresa en Florencia, un centro primario para la industria del calzado italiana en ese momento. Podemos suponer que se sintió atraído allí porque la oferta de trabajadores capacitados era abundante.
Además, las organizaciones compradoras mantenidas en Italia – y establecidas precisamente en Florencia – ofrecieron pruebas del interés de los EE. UU. Por la artesanía italiana para abastecer la gran y creciente demanda en América.
Sin duda, para explicar la actividad de Ferragamo como prolífico inventor italiano, hay que tener en cuenta que la década de 1930 estuvo marcada en Italia por una creciente escasez de materiales esenciales para la fabricación de calzado.
En respuesta, Ferragamo comenzó a desarrollar zapatos fabricados con una variedad de materiales que eran menos costosos que el cuero, en gran medida importados, y que se podían encontrar fácilmente en el mercado italiano. Fieltro, rafia, hilos metálicos, corcho y pieles de diferentes tipos de animales, como sapos, peces y cabritos, se convirtieron así en rasgos distintivos del ingenio de Ferragamo, como lo demuestra el notable número de patentes que registró en la década de 1930.
Salvatre Ferragamo: zapatos icónicos
Kimo sandal
Inspiradas en los calcetines tradicionales japoneses, Tabi, las Kimo sandals fueron los primeros zapatos que Salvatore Ferragamo presentó en una pasarela junto a los diseños del creativo Emilio Schuberth. Las sandalias en cuestión se distinguían por las tiras al frente que forman un patrón en rombos, acompañadas por un calcetín confeccionado en cuero o satín que, originalmente, era del mismo tono que el vestido.
Ghillie
Es el resultado de un zapato plano con respecto a su base y a la superficie sobre la que se posa. En 1938, Vogue USA reconoció a Ferragamo como «responsable de esta idea radicalmente nueva, la elevación de la suela».
Ghillie es un tipo de zapato con cordones a lo largo del empeine y sin lengüeta , similares a los que se utilizan para el baile country escocés. A principios de 1938, Vogue USA anunció este modelo describiendo su “suela de becerro azul [que] asciende a un tacón de corcho cubierto de becerro sobre un ghillie de ante rojo”.
Fue nuevamente en 1938, el zapato “ghillie” fue anunciado por Vogue junto con tres modelos de zapatos diseñados por Ferragamo. El modelo de zapato reproducido y patentado, una sandalia fue uno de ellos. En otros modelos patentados se presenta una sandalia que se diferencia del modelo por el cordón, que parte de la suela, envuelve el talón y el empeine y está abrochado en el lado opuesto sin ningún medio de abrocharse como hebillas o botones y está elaborado con aplicación del sistema de tejidos y redes, patentado en Italia en 1938.
En 1978, se crea bajo la dirección creativa de Fiamma Ferragamo el modelo más famoso de la marca Ferragamo entre el calzado para mujer: Vara.
El icónico zapato de salón de Ferragamo con un tacón de 3 cm fue diseñado en 1978 para la colección de invierno 1978-1979. Este primer modelo se llamaba Lillaz y ya tenía las señas de identidad que han hecho de Vara un icono de estilo: el lazo plano y la placa metálica con la firma Ferragamo.
El modelo Lillaz estaba confeccionado en piel de becerro o cabrito; la suela era de cuero. El zapato, sin embargo, no recibió el favor del mercado estadounidense ya que tenía el talón cubierto con capas de cuero. El año siguiente el zapato Lillaz fue lanzado nuevamente en Estados Unidos con el talón forrado con la misma piel que el empeine.
La versión original, con el tacón cubierto de cuero, se convirtió en el famoso zapato de salón Vara.
Podemos decir que este zapato constituye, en el mundo del calzado, uno de los pocos ejemplos de gran longevidad de un mismo modelo, que ha sido uno de los mayores aciertos de la marca, gracias también a su extrema comodidad, su versatilidad para satisfacer las necesidades de todas las edades y ocasiones de uso.
La marca Salvatore Ferragamo lanza su nuevo zapato icónico, Viva, un calzado diseñado bajo la dirección creativa de Paul Andrew con linaje minimalista coronado con un lazo extragrande creando una sensación de energía fresca y joven.
Cuenta con más de 50 variaciones en distintos colores, alturas de tacón y materiales, tantos modelos como fans de un nuevo calzado diseñado por Andrew para satisfacer las innumerables necesidades de una generación emergente.
Viva nace como inspiración del zapato Vara, un modelo reconocido de la Maison Ferragamo, creado por la heredera del fundador: Fiamma Ferragamo en 1978 al igual que Fiamma, Viva representa la valentía, determinación, y originalidad de la mujer, por eso cuenta con un elenco mujeres independientes con estilo único que lo representa,.
Entre elles Camila Mendes, Dara Allen, Paloma Elsesser, Kiersey Clemons, Olivia Sui y Debby Ryan. Gracias a ellas y a la calidad de los materiales premium utilizados como denim, cuero y lona del lino, Viva se convierte en una estrella más del mundo artístico.
La firma italiana bajo la dirección creativa de Paul Andrew también ha creado las sandalias ‘Abriola’, que reflejan la idea de innovación que combina la elegancia y las formas novedosas junto con los diseños clásicos de Salvatore Ferragamo.
El segundo modelo es el que recibe el nombre de ‘Cerreto’, un botín con el tacón jaula, forma que viene pisando fuerte en las temporadas, en dorado combinado con estampados y colores. De esta manera la marca adapta el modelo de tacón a diferentes tipos de zapato.
Las tonalidades son principalmente doradas, en combinación con los distintos colores que se encuentran disponibles para las sandalias, destacando el rojo brillante, los tonos pastel, el negro y el blanco.
Algunas Sutilezas en los diseños de la marca Ferragamo.
Estos son algunos de los modelos de diseños de calzado que son iconos del jet set de la moda internacional Diseños que no dejaron estar comprometido con las técnicas tradicionales de fabricación de calzado artesanal.
La marca Ferragamo pudo adaptarlas a los métodos de producción modernos mediante la explotación del conocimiento de las disciplinas (anatomía humana y matemáticas) que estudió en la Universidad de Los Ángeles.
Una vez de regreso en Italia, Ferragamo comenzó a patentar zapatos y partes de ellos. Al principio, experimentó nuevas ideas en la fabricación de calzado explotando sus conocimientos de ortopedia.
Este es el caso de la patente, registrada tanto en Estados Unidos como en Italia, de un soporte para reforzar las suelas de los zapatos. Según el inventor, la necesidad de dicho refuerzo “se siente especialmente en los zapatos ligeros de mujer donde los tacones marcadamente altos no permiten el debido apoyo del pie cuando el arco de la suela no es lo suficientemente rígido, mientras que la necesidad de un adecuado la conexión entre el talón y la suela se siente aún más, debido a la delgadez de la suela en los zapatos de mujer ”
La historia de la marca ha dejado por sentado que en los momentos difíciles, se puede encontrar soluciones en la creatividad y la innovación: esta visión ha acompañado a la firma y con la emergencia del Covid 19, los ha guiado en el descubrimiento de materiales alternativos, regenerados y circulares para sus colecciones.
Desde la seda orgánica hasta los hilos de nailon regenerados, desde la cachemira reciclada postconsumo hasta el cuero certificado, Salvatore Ferragamo sigue combinando la creatividad y la experimentación con el mismo entusiasmo que caracterizó el trabajo en la época de las postguerra durante los años treinta del siglo pasado.
La experiencia de la elaboración de sus diseños más icónicos, está formada por artesanos excepcionales y ha permitido seguir ofreciendo a los clientes productos en los que la calidad del Made in Italy, la belleza y la comodidad encuentran su máxima expresión.
Antes del estallido de la pandemia, la empresa estaba trabajando para consolidar su posicionamiento, invirtiendo para fortalecer su presencia digital, optimizar las tiendas físicas y comunicar de forma coherente con los valores que siempre los han definido.
La pandemia ha reforzado la visión, y transcurre en ese camino centrándose en la estrategia a largo plazo: en este sentido, Ferrucio Ferragamo afirma:
“estamos convencidos de que la clave de la recuperación está en seguir creyendo en las ideas, el compromiso y la creatividad sin olvidar nunca nuestra historia y nuestro patrimonio”.
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Este artículo se ha realizado por la redacción del equipo de EOB, si quieres contactar con nosotros mándanos un mail a info@enriqueortegaburgos.com