En esta entrada continuaremos ahondando la relación que existe entre las parodias y la moda. Como vimos, la moda se trata, básicamente, de las tendencias en la forma de vestir y accesorios que son tendencia durante un periodo determinado de tiempo. A través de la historia, la forma de vestir ha sido muestra de una sociedad en un periodo determinado.
En la entrada anterior vimos las teorías de transmisión de la moda, la vertical que consiste en que los modos de las clases son imitados por las clases bajas, mientras que la teoría horizontal consiste en adoptar los modos de los grupos al cual se pertenezca.
Pero en la actualidad, las tendencias de la moda se dan en las redes sociales, siendo el feed de Instagram donde vemos las tendencias de moda que se imponen en estos tiempos.
Ahora bien, la parodia consiste en los cambios que se hacen de una obra de cualquier expresión de arte de forma humorística para hacer criticas. Las parodias han existido desde que el hombre encontró la forma de expresarse por medio de arte.
En este sentido, si bien la moda no puede ser considerada un arte, ya que su finalidad ultima es netamente utilitaria como la de vestirnos y protegernos del exterior, la creatividad ha sido parte importante de la moda. Ahora bien, en los últimos años la moda se ha vuelto más democrática, informal y accesible, las marcas, sobre todo las de lujo, comenzaron a ser más conocida. Por ello, los parodistas no han perdido tiempo en hacer parodias de las marcas o hasta la industria de la moda en general.
Vimos las parodias que se han realizado de la industria de la moda en medios como la televisión y el cine. En la televisión destaca la parodia realizada por la serie animada Los Simpsons del célebre traje de dos piezas (blazer y falda) de Chanel y en el cine, sin duda, la parodia por excelencia de la industria de la moda es el film Zoolander.
En dicho filme, en clave muy humorística se hace varias criticas a la moda, desde la frivolidad de los modelos, pasando por las criticas en relación al trabajo infantil en los talleres donde se confeccionan las prendas de moda. Y como olvidar la ya legendaria colección de la película Derelicte del diseñador Mugatu (Will Ferrer), la cual es una parodia de una colección de John Galliano para Dior de 1999, que causó criticas en su momento por inspirarse en las personas sin techo.
Sigamos conociendo más de la parodia en la moda.
EL STREETWEAR PARODIA LA MODA
Aunque el streetwear en la actualidad es parte importante del sector de la moda, en la década de los 80 muchas marcas de ese sector, como eran consideradas unas “marginales” dentro de la industria de la moda, comenzaron a burlarse de las marcas prestigiosas de la moda a través de la parodia.
En este sentido, uno de los considerados como uno de los primeros parodistas de las marcas es el diseñador Dapper Dan, quien usó (sin sus respectivas autorizaciones) logos de marcas como Louis Vuitton, Prada y Gucci.
Dapper Dan se convirtió en el diseñador favorito de las primeras estrellas del rap, por lo que era común verlos usando las chaquetas con los logos de las marcas de lujo, aunque no eran auténticos. En 1992, Dan tuvo que cerrar su tienda en Harlem, Nueva York debido a los enfrentamientos con las marcas.
Aunque no existe abiertamente una intención irónica en sus creaciones, el diseñador mezcló esos logotipos de lujo con el mundo del rap y el hip hop, lo cual en ese entonces era algo impensable y esas marcas no querían ser asociadas con ese medio. Sin embargo, casi cuarenta años después justamente las estrellas del hip hop y rap como Jay Z se han convertido en los mayores exponentes del lujo.
PARODIA EN LOS AÑOS 2000
En los años 90 comenzó el apogeo con las marcas de streetwear y sportswear, además, marcó el inicio del imperio de fast fashion, por lo que comenzó la democratización de la moda. En este sentido, una marca que comenzó a surgir en esa época fue Supreme, que en esa época era la marca skater de Nueva York y en la actualidad es una de las más relevantes y ya ha incursionado en el sector del lujo.
Sin embargo, durante los primeros años 2000, la relación entre Supreme y el lujo no eran muy cordiales, por cuanto la marca de streetwear lanzó una serie de patinetas que contenían el monograma LV, por lo cual Louis Vuitton envió una carta de cese de uso, por lo que Supreme retiró las patinetas. En la actualidad, Supreme y Louis Vuitton tienen cordiales relaciones que hasta han colaborado.
DISEÑADORES PARODISTAS
Ahora presentamos dos diseñadores parodistas que han pisado fuerte dentro de la industria de la moda, a pesar de las parodias que hacen de marcas de moda y accesorios de lujo. En este sentido, comenzamos con Brian Lichtenberg, un diseñador estadounidense, fundador de la marca BLTEE, que se ha hecho famoso por sus camisetas parodias, en las cuales vemos sus versiones de marcas como Chanel o Hermès.
El debut de BLTEE fue en 2006 al lanzar la camiseta Brianel No. 1, una parodia de Chanel No. 5. Posteriormente lanzó parodias de YSL y Margiela, sin embargo, ha sido la parodia de Hermès, Homies, la que se ha vuelto viral. De hecho, sus creaciones han sido usadas por famosas como Beyoncé, Miley Cyrus y hasta Lady Gaga. Aunque ha parodiado marcas de lujo como Céline y Balmain, Brian Lichtenberg ha dicho que admira y respeta dichas marcas, que por cierto las usa.
La otra marca que se caracteriza por sus parodias es SSUR es una marca de estilo skater, fundada por el ucraniano criado en Coney Island, Russ Karablin. La marca llegó a tener notoriedad en 2012 al lanzar una colección donde las prendas tenían impresa la leyenda “Comme des Fuckdown”, una parodia a Comme Des Garçons.
A pesar de lo explícito de este signo, desde la casa de modas francesa fundada por Rei Kawakubo no hubo molestia alguna, al contrario, Adrian Joffe, presidente de la casa de modas expresó lo siguiente: “No nos molesta en lo absoluto, es muy divertido. Solo lo he visto en personas muy cool. Espero que un día crucemos caminos con los responsables”.
Otra marca que también se ha hecho conocida gracias a las parodias es Reason, la cual se hizo famosa entre los años 2012 y 2013, gracias a sus camisetas con parodias de marcas tales como Dior (Poor), Fendi (Trendi) y Balmain (Nawman).
En el año 2012 fue lanzada la marca parodia Conflict of Interest. En su página web esta marca se define como una agencia gubernamental ficticia encargada de confiscar productos de diseñadores que no tienen licencias de uso. Los productos de excelente calidad los distribuyen a través de los canales regulares de ventas, mientras que los demás los destruyen.
Con esto en cuenta, Conflict of Interest hace parodias de marcas como Balenciaga (Ballinciaga), Chanel (Chapel), Kenzo (Benzo), Givenchy (Giraunchy), Tom Ford (Tom Lord), Miu Miu (Niu Niu), Balmain (Brawlmain), Jill Sanders (Ill Slander), Bottega Veneta (Bodega Vendetta).
Como vemos, han sido las marcas de otro target, las que han hecho parodias de las marcas de lujo, como una forma de transgredir la industria de la moda donde generalmente son las todopoderosas Dior, Louis Vuitton, Chanel, Gucci, Prada, Balenciaga, las que se ubican en las posiciones superiores.
Para muchos, usar prendas de estas marcas parodias es jugarle una broma pesada a la moda de lujo. Pero también, desde el lado del usuario, usar una parodia de una marca es una manera de acercarse a marcas que están fuera del alcance de la gran mayoría por sus altos precios.
Ahora bien, estas marcas han sabido hacer unas buenas parodias, las cuales las han librado de problemas con las casas de moda de lujo, en primer lugar, a pesar de distinguir prendas de vestir, las mismas se dirigen a otro target. Además, los logotipos tienen diferencias notables que cualquier persona sabe que no existe conexión empresarial alguna.
Las parodias en la moda sin duda reflejan una sociedad más empoderada, si así puede decirse, por cuanto ya no es un espectador pasivo de lo que le ofrece la marca, sino que desea ser parte activa y gracias a las redes sociales lo está logrando. Esto explica el por qué el surgimiento de las parodias de la moda, siendo un fenómeno que no parará.
Sin embargo, las marcas de moda de lujo, mejor dicho algunas, están dejando de ver a la parodia como algo negativo, y están adoptando ciertas estrategias parodistas tanto en sus prendas como en sus campaña publicitarias. Esto debido a que las casas de lujo se han dado cuenta de que tienen que adaptarse a un nuevo público, uno con una forma de comunicación diferente a la tradicional.
En consecuencia, hay casas de modas que han hecho parodias, tales como Moschino a cargo de Jeremy Scott, Balenciaga a cargo de Demna Gvasalia, quien sin duda ha causado bastante polémica y en cierto grado hasta el propio Alessandro Michele le ha incorporado a la casa Gucci algo de parodia.
SI QUIERES CONOCER MÁS SOBRE LA FIGURA DE LA PARODIA, TE RECOMENDAMOS LAS SIGUIENTES ENTRADAS:
PARODIA Y MARCA. 1
PARODIA Y MARCA. 2
PARODIA Y MARCA. 3
PARODIA Y MARCA. 4
PARODIA Y MARCA. 5
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