Enrique Ortega Burgos

Name the Brand. La nueva firma de moda de María Pombo

Qué sorpresa nos hemos llevado en estos días cuando María Pombo, la influencer española que derrocha encanto y estilo por las redes sociales ha lanzado su propia firma de moda.

¿La verdad? No deberíamos sorprendernos tanto. No lo decimos porque días antes algo había adelantado en su perfil de Instagram (@mariapombo), sino porque a estas alturas su imagen y marca personal tiene tanta fuerza que el paso lógico era concretar su marca. ¿Cómo le ha llamado? Name the brand. (@name.thebrand), pero esa es una historia que ya contaremos.

Vamos por parte, porque aquí hay mucho pastel por desmembrar y muchos elementos que analizar. Es más, ya tenemos preparados varios artículos que hablarán de estrategias en redes sociales y sobre influencers, pero no podíamos dejar de hablar de María Pombo y de Name the brand en esta oportunidad, porque su estrategia, a todas luces, es lo que esperaríamos que hiciera una marca hoy en día. Hoy, María Pombo está en el top de la ola con las tendencias y lo está haciendo bien.

Es increíble, en estos días ha sido noticia que la destacada diseñadora venezolana Carolina Herrera ha arremetido contra los influencers, lo que menos les ha dicho es que son bonitos. “Las influencers son algo que parecen importante. Yo no lo entiendo mucho, ellas no tienen estilo. Se van cambiando. Se ponen lo que les den para el show de ese momento”. Sin dudas, creemos que las opiniones de la diseñadora las comparten muchas personas, fuera y dentro de la industria de la moda. Pero aquí ya haremos un primer comentario, estemos o no de acuerdo con el valor que tienen estas figuras, lo cierto es que hoy están generando contenido que es apreciado por los consumidores, transformándose en líderes de opinión respecto a temas concretos, como es el caso de María Pombo, autoridad en estilo y moda. Y, por consiguiente, las marcas deberían estar donde el cliente esté. La marca ajena a toda realidad y a sus clientes ya es anticuada y sólo demuestra con sus acciones que han sido incapaces de innovar, de adaptarse a la actualidad. El que se ciega y hace lo que le place, pasando por alto lo que el cliente quiere, lamentable –o afortunadamente-, está destinado a morir.

María Pombo es el reflejo de las tendencias actuales, del poder de redes sociales, de la importancia de los influencers y ejemplo de cómo capitalizar todo el valor que está impregnado a su nombre. Porque de eso se trata, de saber valorar lo que se es y se tiene, aprovechándolo para obtener beneficios. Esperemos que con este modelo de negocio María Pombo tenga éxito, nosotros nos adelantamos y creemos que así será. En el presente artículo, sin intención de transformarnos en adivinos, daremos algunas pautas de por qué es una buena idea lo que María está haciendo y por qué lo está haciendo bien. ¿Cuáles son sus herramientas? ¿Qué podemos imitar de sus estrategias? Veamos, desmembremos este asunto.

EL VALOR DE LAS REDES SOCIALES

La primera herramienta importante que le ha permitido a María Pombo llegar hasta la creación de su marca es el uso de redes sociales.

Nosotros seguimos a María Pombo en su cuenta de Instragram. Actualmente, tiene más de 1,3 millones de seguidores. Su última publicación a la fecha tiene 70.408 Me gusta y cuenta con 388.260 reproducciones. Su anterior publicación, tiene más Me gusta y reproducciones.

Personalmente, también tenemos perfil en Instagram y seguimos a influencers como Chiara Ferragni (@chiaraferragni) o a la misma Pombo. Y estamos en Instagram como en otras redes sociales, tales como Youtube, Whatsapp, Facebook, Twitter porque es el medio que muchos tienen de comunicar y de conocer todo lo que está pasando en la sociedad.

Tal vez, en el siglo pasado la forma que se tenía de conocer otras realidades, conocer de estilo y moda eran las revistas, la publicidad en las calles, el cine o la televisión. Todos los anteriores, medios de comunicación masivos que permitían llevar a las personas todas las tendencias de una época. Hoy en día, las redes sociales son un medio más que permiten a las marcas y a los clientes conectar entre ellos.

Las redes sociales son democráticas, todos pueden hablar y comentar, expresar sus opiniones –para bien o para mal-, decidir lo que quieren y lo que no quieren. Es un medio peligroso porque se basa en lo cotidiano, en lo último que sale de nuestra mente, en la foto que nos tomamos en el día. Y, muchas veces, como seres humanos que somos, no utilizamos tanto filtro, cometiendo errores. Por otro lado, las redes sociales han permitido que se actúe sin tanto guión –siempre hay excepciones a la regla-, con mayor naturalidad, transparencia, cotidianeidad, permitiendo mayor frecuencia de comunicación. Ok, seguro más de alguno está pensando: ¿las redes sociales son naturales? ¿Acaso esta gente no ha visto lo artificial que es todo en las redes? Si, por ejemplo, Instagram es el lugar donde se ve todo bonito. Efectivamente, hay muchos que se han profesionalizado, que se ha ocupado de la estética y de cuidar todos los detalles de una publicación, pero a fin de cuentas siguen siendo perfiles de personas de la calle que muestran su día a día, que interactúan con otras personas con menos seguidores pero que participan de igual a igual en las redes sociales, a esto nos referimos cuando hablamos de naturalidad. Es más, las mismas marcas se han creado perfiles poniéndose en la misma posición que personas físicas, para compartir de igual a igual. Se han humanizado.

En el caso de María Pombo, ella lleva varios años haciendo uso de redes sociales. En su perfil, la influencer comparte su lifestyle, habla de lo que hace, de lo que le gusta y no gusta. Pudimos ver su matrimonio, su luna de miel, compartir con ella los atardeceres. Todo muy romántico, todo muy cotidiano.

¿Y qué se consiguió con tanta foto, mensaje e stories? Ha llegado a tal punto el uso de redes sociales que su perfil comenzó a tomar valor. Ella, al igual que muchas influencers, comenzó a profesionalizar sus redes, a definir su target, su contenido y a aprovecharse de los beneficios que les pueden traer.

Así pasamos al segundo punto.

MARÍA POMBO, SU MARCA PERSONAL

No solo el usar las redes sociales en una década en que todo lo que ocurre se está reflejando ahí es importante. La segunda herramienta que le ha ayudado en la estrategia de María Pombo para llegar a lanzar su marca es la creación y desarrollo de una marca personal.

La influencer se ha dedicado a darle valor a su nombre. Ha dicho qué le gusta y qué no le gusta. Qué ropa usa, a qué restaurantes va, qué productos de cosmética usa, cómo le gusta vestir, quiénes son sus amigos, su familia. Todo eso le ha permitido definir de forma muy clara cuál es su lifestyle, que es seguido por un segmento determinado.

¡Ya quisieran muchas marcas tener un lifestyle definido! Y María Pombo lo ha conseguido de la forma en que se debería hacer: con naturalidad, cercanía y, sobre todo, COHERENCIA. Estos conceptos no se nos deberían olvidar nunca, porque son esenciales para llegar a los clientes en la actualidad.

María Pombo, antes de lanzar su marca, Name the brand, ya tenía mucho trabajo hecho.

De cierta forma, pareciera ser que el trabajo se hizo al revés, primero se trabajó en todo el contenido, se solidificó y luego se creó la marca. Pues María Pombo no es la primera en hacerlo, ejemplos de éxito previo ya existen: Rihanna, Chiara Ferragni, Laura Corsini (Bimani), entre muchos otros casos. ¿Por qué todavía muchos reniegan del éxito de la fórmula?

Por supuesto, hay mucho trabajo detrás de un perfil de redes sociales, mucho trabajo en la creación de contenido, de formación de marca personal. Es, básicamente, lo mismo que se tiene que hacer para una marca, pero con una persona física.

De esta forma, con el uso de las redes sociales y desarrollo de marca personal, María Pombo logró en el tiempo darle valor a su nombre, darle credibilidad, a punta de naturalidad, cercanía y coherencia. ¿Lo siguiente? Vender. Así llegamos a la Cápsula cero.

NAME THE BRAND

En este punto hay tanto que decir que puntualizaremos las estrategias que se han usado en los últimos días, las que consideramos muy acertadas.

UNO – ELEMENTO SORPRESA

María Pombo anunció que tendría su propia marca de ropa y que en cualquier momento se sabrían más detalles. Ya generó expectación, deseo. De seguro sus seguidoras se imaginaron vistiendo las prendas de María. Al par de días, sin previo aviso, se lanza la marca.

Una genialidad, mantiene el suspenso y el deseo de no perderse nada.

DOS – MODA COLABORATIVA

Esto es tendencia, porque es natural, cotidiano y permite que la comunidad participe, que se sienta parte de algo. Que juegue y experimente la marca. Es el mismo efecto que produce Laura Corsini con Bimani.

Conseguir que los clientes se sientan parte del negocio y de la toma de decisiones no es fácil pero, hoy en día, en una época en que todos quieren opinar y actuar es fundamental. Quizá es el legado que nos han dejado las redes sociales. Los usuarios y clientes ven a las marcas como un perfil más con el que interactuar y se sienten tan creadores de contenido o con capacidad para opinar que se sienten felices de hacerlo.

¿Qué hizo María Pombo? Lanzó su marca sin tenerle un nombre definido. Dio tres opciones: “Love you mess”, “Name the brand” y “Capsule zero” y fueron los potenciales clientes y seguidores de Pombo quienes en un plazo de 24 horas eligieron el nombre. Ganó con un 55.02 % “Name the brand”.

TRES – NAME THE BRAND ES MARÍA POMBO

¿Esta marca hubiese tenido la misma notoriedad inicial sin María Pombo detrás? Claro que no. Ejemplos de marcas que se intentan desarrollar desde cero son muchas y es un trabajo con éxito incierto. En el caso de María Pombo, haber utilizado su nombre y marca personal era fundamental. Ella es la marca.

En el sitio web de la marca namethebrand.es se deja muy en claro que la marca tiene toda la inspiración en María Pombo. Por supuesto, es coherente con su lifestyle y gusto personal. Eso es lo que sus seguidores buscan.

¿Y la forma de contarlo? Por medio de fotografías, que muestran su lifestyle. Nada dice más que las fotografías, sobre todo cuando ya conocemos quién es Pombo.

CUATRO – ES MARÍA QUIEN HABLA

Totalmente en concordancia con el punto anterior, cada uno de los textos del sitio web oficial de Name the brand parecen ser redactados por María. Quizá es así, quizá no, pero les aseguro que cuando los lean lo harán con la voz de la influencer. ¿Por qué se produce esto? Insistimos, por el valor de la marca personal de María Pombo.

CINCO – EL PRODUCTO

Por supuesto que para tener una marca de moda hay que tener producto. Junto con el estreno del nombre, ya teníamos la primera colección: Capsule Zero. Con precios que van entre 59,99 a 149,99 euros, podemos ver la inspiración de Pombo en cada una de las prendas. Es ella.

Este punto no es menor, de hecho es fundamental. Se nota que hay trabajo serio y dedicado. Las prendas no son cualquier cosa, sino que en ellas se puede sentir el espíritu de la influencer. Lograr este cometido no es tarea tan fácil.

Por lo demás, la creadora se ha ocupado de darle un nombre especial a cada prenda y a explicar su inspiración. Este contenido hecho con naturalidad, cercanía, haciendo participar a los clientes del proceso, todo de forma coherente, es lo que marca la diferencia.

¿El resultado? El sitio web colapsado en su primer día.

Y aún así hay personas que miran en menos el valor que pueden tener los influencers. Señores, aceptemos la realidad. La negación no lleva a nada más que a perder oportunidades.

SEIS – EXCLUSIVIDAD

Ya lo dijo María Pombo en uno de sus vídeos: la primera colección es una edición limitada. Lo que se complementa con lo que ha dicho respecto de la inspiración de su primera colección: las existencias son limitadas.

Este punto marca parte de la estrategia de Name the brand. Si al elemento de sorpresa le agregamos exclusividad sale algo interesante: el deseo por tener YA el producto. Si no lo compras, puede ser que luego no exista. Así de simple.

La estrategia ya la han usado otras marcas con anterioridad y puede funcionar a largo plazo si María Pombo logra acostumbrar a sus clientas a la dinámica. O comprar cuando sale la colección o perderán la oportunidad de obtener el producto. See now, buy now.

Por otro lado, no queremos dejar de mencionar que de esta forma también se le está dando valor al producto, eso que se ha perdido mucho hoy con el fast fashion. Sí, es cierto que debes comprar en el momento, pero al comprar estarás adquiriendo un producto exclusivo, que pocos tendrán, que está hecho por María Pombo –quien ya es conocida como referente de buen gusto- y, además, que tiene una inspiración. No se trata de precio, sino de dar valor a nuestros productos.

SIETE – CUSTOMER JOURNEY, ¿QUÉ ESPERAR?

Esto está recién empezando. Hasta ahora se nota buen manejo de la marca pero no hay que detenerse. Veamos cómo funciona el proceso de venta, de envío de las prendas, el servicio post venta. Todo el customer journey debe ser perfecto y COHERENTE con lo que Name the brand ofrece.

Por favor, al equipo de María Pombo, que el packaging refleje el glamour que podemos ver en la marca, que todo sea de calidad. Que la atención al cliente siga siendo cercano, amable, dulce. Incluso y con mayor razón cuando se presenten incidencias con una compra.

Si no se es coherente en todo el proceso no solo se arruinará la marca naciente sino también el nombre de María Pombo. Ya les decimos, el cliente esperará sentirse atendido personalmente por María y, aunque ella no lo haga de forma directa, hay que dejar a cada cliente con la sensación de que así fue.

SEGUIMOS ONLINE…

Sin lugar a dudas, seguiremos monitoreando cómo se desenvuelve en el mercado la marca de María Pombo. Ya vemos muchos desafíos por delante en los que, por seguro, se está trabajando con mucho profesionalismo. ¿Cuáles serán las nuevas colecciones? ¿Serán capaces de mantener la atención con sus colecciones cápsulas? ¿Conseguirán tener productos icónicos? ¿Logrará Name the brand ser un ente independiente de María Pombo? ¿Cómo trabajaremos la onmicanalidad? Lo ideal sería que en poco tiempo María Pombo lleve su marca a la venta física, ya sea con tienda, showroom, pop ups u otra forma creativa. Quedarse en la web puede ser una buena estrategia para comenzar, pero con clientes que buscan experiencias es necesario trabajar la omnicanalidad y para eso se hace indispensable trabajar en lo físico. De hacerlo, podrían alcanzar a mujeres que no usan redes sociales pero que sí se pueden identificar con el estilo de María Pombo.

Esperamos que el ejemplo de Name the brand y nuestro análisis sirva para que aprendamos a valorar los recursos que cada empresa tiene para sacarles el máximo provecho. Insistimos, por enésima vez, el cliente busca coherencia en nuestro actuar y eso debemos ofrecerles. Hasta este punto, María Pombo lo ha logrado, esperamos que no se pierda en el camino y que pueda seguir creciendo.

PALABRA DE MARY

Sé que lleváis muchísimo tiempo escuchando que voy a lanzar un proyecto nuevo y por fin ha llegado el momento.Es una marca inspirada en mí, en las redes sociales y vosotros tenéis mucho que ver con todo esto. Es un proyecto
cien por cien en moda a las personas como yo que buscan inspiración en todas partes. Obviamente cuando empiezas con un proyecto así te surgen muchísimas dudas, cómo empiezas, con qué equipo cuentas, en qué te vas a
inspirar, que quieres transmitir a la gente
He tenido una cosa muy clara, y es que quería que vosotros formarais parte de este proyecto junto a mí como lo habéis hecho desde que comencé en las redes sociales.
Y No quiero que sea solo una marca de ropa, quiero que vaya un poquito más allá.

(Manifiesto de María Pombo)

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