Enrique Ortega Burgos

LAS MARCAS DE AGATHA RUIZ DE LA PRADA

¿QUIERES CONOCER LAS MARCAS DE LA DISEÑADORA AGATHA RUIZ DE LA PRADA?

 

La movida madrileña es un hito en la historia cultural de España. De ella, surgieron auténticos iconos de la música, el cine… y también de la moda. La marca Ágatha Ruiz de la Prada comenzó sus andanzas durante la movida, siendo esta su mejor trampolín hacia el mundo. Acompáñanos a conocer sus registros más icónicos.

 

Breve historia de la marca

 

A sus escasos 20 años, en 1981, Ágatha (antes, Águeda) Ruiz de la Prada, deslumbró con su primer desfile en el Museo de Arte contemporáneo de Madrid.

Su vocación por la moda le viene, según comenta, desde muy pequeña, cuando ya se tomaba el traje y el diseño como un trabajo: para ella, nunca fue un juego.

Tras haber estudiado en Barcelona, tuvo sus primeros contactos con la moda como ayudante del diseñador Pepe Rubio, hasta que comenzó sus andanzas en solitario (empezó junto a una colaboradora, pero la alianza no prosperó).

Desde aquel primer desfile en los 80, ha desarrollado su firma en toda su extensión, no limitándose a la costura. Ha abarcado, también, otros ámbitos como la perfumería, la decoración, papelería y hasta accesorios para mascotas.

Su estilo es inconfundible: colorido (pues es enemiga declarada del negro) y plagado de figuras y formas, sobre todo las estrellas, rayas y corazones; con los que ha “agatizado” muchos y muy variados sectores.

Comenzó a licenciar su marca en 1991. Cuenta que su primera licencia fue para una marca de medias y, las siguientes, con una marca de sábanas y otra de vajillas. A partir de ahí, su universo no ha parado de crecer.

Tras su paso por plazas como Nueva York, Milán u Oporto, el año 2020 la ha llevado a replantearse el futuro, en el 40º aniversario de su firma. Si algo podemos tener claro, es que no nos dejará indiferentes.

 

La primera marca de Ágatha Ruiz de la Prada

 

El primer registro de la marca “Ágatha Ruiz de la Prada” se solicitó en la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), en 1982, para la Clase 42 (servicios propios de un estudio de diseño en general); tan sólo un año después de su primer desfile.

 

Registro de la marca AGATHA RUIZ DE LA PRADA en 1982

Según el registro de la OEPM, se trata de una marca mixta. Podría pensarse, que se ajusta más a una marca de tipo denominativo, pero, lo cierto, es que, cuando una marca denominativa incluye elementos gráficos, como el color, puede catalogarse como mixta.

Pero, ¿dónde está el color en la marca que hemos visto? –puede que te preguntes.

Si te fijas, en una segunda línea, puede leerse “rosa fucsia” debajo de las palabras “AGATHA RUIZ” y “rojo anaranjado” bajo las palabras “DE LA PRADA”.

Se entiende que estas anotaciones hacen referencia a los elementos de color de la marca, aunque dichos colores no se reflejen en la imagen del registro.

 

El universo de Ágatha Ruiz de la Prada

 

Como hemos visto, los inicios de la marca madrileña  vinieron señalados, además de por su éxito en la costura, por su expansión a sectores de lo más diversos.

Por ello, algunos años más tarde, en 1985, se solicitó la marca denominativa “AGATHA RUIZ DE LA PRADA”, también en la OEPM, para productos tales como: perfumería y cosmética (Clase 3); paraguas, sombrillas… (Clase 18); tejidos y textiles no comprendidos en otras clases, así como ropas de cama y mesa (Clase 24); y vestidos, calzado, sombrerería… (Clase 25).

Con esto, se aseguraba la exclusividad de su marca para estos productos en España.

Sin embargo, ya por aquel entonces se comenzaba a vislumbrar el camino que la firma tenía por delante en el panorama mundial.

Así que, en 1987, decidió presentar ante la Oficina Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI, por sus siglas en inglés) una solicitud de registro internacional de su marca para las Clases 3, 18, 24 y 25. En concreto, designó 13 países donde quería registrar su marca.

 

 

Licencias y las marcas de Ágatha Ruiz de la Prada

 

Es en este contexto de gran variedad de productos para los que se han registrado sus marcas, donde aparece la figura de la licencia.

Mediante su uso intensivo, se ha asegurado que su marca y sus diseños están presentes allá donde uno mire.

La diseñadora destaca que sus creaciones visten a personas de todas las edades y están presentes en todo tipo de artículos, lo que ha contribuido en gran medida a su éxito.

Tal es la importancia de las licencias para el modelo de negocio de la firma que, en su propio sitio web, se puede consultar un listado con los licenciatarios actuales (y antiguos), ordenados según el tipo de producto.

Dentro de esta vorágine de sectores en los que Ágatha Ruiz de la Prada ha licenciado sus marcas, encontramos, como curiosidad, la marcaAGATHA RUIZ DE LA PRADA CASA Y COSAS”.

Fue registrada en la OEPM en el año 2000, para la Clase 39: almacenaje, depósito, distribución y transporte de toda clase de mercancías; reparto de mercancías solicitadas por teléfono…

Unos años después, en 2003, se inscribió en la OEPM una licencia (exclusiva, total e ilimitada en el tiempo) sobre esta marca, a favor de la empresa Producciones Ana Sandra S.L.

Esta empresa parece importante en cuanto a las licencias de Ágatha Ruiz de la Prada, pues posee otras, como la que ostenta sobre la primera marca registrada que hemos mencionado, de 1982, y, también, sobre la de 1985.

 

Las formas y los colores de Ágatha Ruiz de la Prada

 

Formas y colores, pero no en el sentido de registrar una forma o un color como marca en sí mismos.

El estilo de la diseñadora madrileña se podría describir como una explosión de color que incluye formas y elementos muy característicos.

Tanto es así, que, cuando vemos un conjunto de este estilo, lo asociamos rápidamente con un diseño de Ágatha Ruiz de la Prada.

Así que, como no podía ser de otra manera, se buscó proteger algunos de esos elementos a través de los derechos de marca.

 

Es el caso por ejemplo, de esta marca de la Unión Europea, registrada en 2004, casi para todas las Clases relativas a productos.

Esto se hizo así, porque se trata de un diseño que puede incluirse en cosas muy variadas: desde una camiseta, hasta un mueble de baño.

Además, se reclamaban los colores de la composición como parte de la marca.

 

 

 

Por aquellos años, y siguiendo con esta política en materia de Propiedad Industrial, se solicitó también esta marca, en 2003.

Consiste en una figura de un corazón, con los colores naranja, rojo y blanco (también reivindicados) y para una gran variedad de clases. De nuevo, se trata de un diseño que se puede incorporar a muchos productos.

Dentro de este tipo de registros, hablaremos, por último, de este que, habiendo sido solicitado en 2003, se terminó registrando en 2012.

Se trata de uno de los diseños más icónicos de la firma, junto a los dos anteriores. Consiste en una flor, de trazos muy sencillos, con los colores magenta, verde, amarillo y blanco, que también se reivindican.

 

Las marcas de Ágatha Ruiz de la Prada en la perfumería

 

Perfumería y moda es un tándem indisoluble. La potencia del negocio de las fragancias las hace una línea segura por la que apuestan las marcas de moda.

En el caso de Ágatha Ruiz de la Prada y, dado el tamaño de su portfolio de productos, no podía faltar la perfumería.

En este caso, la licencia de su marca para estos productos es titularidad del gigante español Puig, que tiene en cartera otras tan relevantes como Carolina Herrera, Paco Rabanne o Jean Paul Gaultier.

Sin embargo, no siempre fue así. Antes del año 2000, la licencia de perfumería de Ágatha Ruiz de la Prada era propiedad del grupo Myrurgia (español, también). Fue en ese año cuando el grupo Puig adquirió Myrurgia y así, la licencia, pasó a manos de Puig.

Encontramos, como marcas registradas, los nombres de las fragancias en diversos países, como España, Perú, México… Latinoamérica, en general, cuenta con bastantes registros, pues se trata de un mercado muy importante para la firma. También, constan como marcas de la UE.

Se han registrado, entre muchas otras: Wow Girl, Oh La La!, Muac, Beso

Frascos de las fragancias Wow Girl (izq.) y Beso (dcha). Fuente: https://www.agatharuizdelaprada.com/store/es/perfumeria/

 

Las últimas en incorporarse su portfolio de fragancias han sido las marcas de la Unión Europea “Look at me”.

Y decimos marcas, en plural, porque en 2019 se solicitó el registro de dos marcas figurativas, en la EUIPO, para esta fragancia, marcas que están registradas en la actualidad.

 

Pero la cosa no se quedó ahí, porque en diciembre de 2020 se ha solicitado el registro de una tercera marca, relativa a esta fragancia, que aún está en proceso de ser registrada.

Los diseños industriales de Ágatha Ruiz de la Prada

 

Por último, viendo los envases de las fragancias anteriores, poco habituales, uno podría preguntarse si la firma española los habrá protegido a través de otras figuras de Propiedad Industrial, como los diseños industriales.

Los productos, como no podía ser de otra manera, son de lo más variopinto.

Encontramos diseños registrados, allá por 2005, para la categoría de alfombras y de ropas de baño (albornoces). La titular, es una empresa llamada Monesal S.A., ya extinguida.

 

 

Asimismo, tenemos algunos diseños industriales para calzado, registrados en 2012, cuya titular es International Shoes Garvalín S.L., una de las muchas licenciatarias actuales de Ágatha Ruiz de la Prada. En este caso, posee la licencia para la categoría de calzado infantil.

 

 

 

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